La Dirección General del Agua, dependiente de la Consejería de Agricultura del Gobierno de la Región, se ha comprometido a elaborar un estudio exhaustivo sobre los efectos económicos y laborales que tendría en Jumilla el cierre previsto de los acuíferos a partir de 2027, fecha límite para el cumplimiento de la Directiva Marco Europea del Agua que impone dicha clausura.

Compromiso de la Dirección General del Agua para realizar el estudio

El director general del Agua, José Sandoval, se reunió esta semana con la Comunidad de Regantes Cañada del Judío de Jumilla, y se comprometió a presentar un análisis exhaustivo de dichas consecuencias, a petición de la portavoz del PP en el Ayuntamiento, Seve González.

Gónzalez pidió a Sandoval, “un diagnóstico del perjuicio económico y social que supondría para la Comarca del Altiplano y para Jumilla el cierre en 2027 de nuestros acuíferos sobreexplotados, en caso de que el Gobierno de España se niegue a plasmar en los Presupuestos Generales del Estado las soluciones que existen a este problema y que ya hemos propuesto”.

El PP apuesta por una estrategia nacional de recarga artificial de los acuíferos

Estas soluciones para la popular pasan por la realización por parte del Ministerio de las obras hidráulicas que deben ir reflejadas en los Presupuesto Generales del Estado, a través de una estrategia nacional de recarga artificial de acuíferos. Una estrategia que según Seve González, “no solamente daría la solución necesaria la Altiplano, sino también al resto de municipios españoles que se ven abocados al cierre de sus acuíferos sobreexplotados si antes de 2027 no se consigue una recarga de los mismos”.

2027 está a la vuelta de la esquina

En relación al cierre de acuíferos previsto para 2027, José Sandoval afirmó que, “tenemos sobre la cabeza una espada de Damocles que nos está condenando al cierre de las extracciones de los acuíferos, o a adecuar las extracciones a la recarga natural de los mismos que pueden suponer un déficit de extracción para las zonas de acuíferos sobreexplotados de la cuenca del Segura de casi 200 hectómetros cúbicos de agua”.

El director general alertó sobre una problemática que está a la vuelta de la esquina, “parece ser que el Gobierno central no está dispuesto a afrontarlo. Si a este tema no se le pone solución, nos enfrentamos al cierre de explotaciones de regadío por falta de recursos”.