Después de mas de tres años de trabajo ha finalizado la restauración del gran órgano histórico de la iglesia de Santiago, realizada por el “Taller de Organería Frédéric Desmottes”, y que al inicio de este mes de febrero llevaba a cabo la parte final del proceso colocando las últimas piezas y procediendo a la armonización y afinación del instrumento.

Armonización y afinación, el laborioso final de la restauración

Olivia Desmottes en el proceso final de armonización

Olivia Desmottes explicaba lo laboriosa y minuciosa que ha sido esta parte final de la restauración, ya que para que el instrumento quede totalmente acabado y preparado para ser usado, es fundamental realizar el proceso de armonización y afinación, para lo cual hay que cortar a tono cada uno de los tubos, comprobar el sonido y volver a realizar esta operación hasta que cada uno de ellos quede perfectamente afinado. Una fase en la que afirmaba, que sobre todo, “hay que tener paciencia”.

Olivia se mostraba muy satisfecha durante este trabajo de armonización, ya que a pesar de ser un proceso complejo “todo estaba saliendo muy bien” y además el trabajo previo en el taller estaba facilitando mucho estas horas finales de trabajo en el órgano. Según Desmottes, solo a falta de realizar al afinación general de algunos registros, las sensaciones eran muy buenas y afirmaba que “estaban muy contentos con el trabajo, ha quedado un instrumento muy rico y con muchísimas posibilidades musicales”.

Desde el “Taller de Organería Frédéric Desmottes” hacen una valoración muy positiva de esta restauración, aunque ha sido un proceso inusual sobre todo por dilatarse tanto en el tiempo, casi cuatro años, están muy satisfechos con la actuación realizada, “ha sido duro pero con un resultado que vale la pena” concluía Olivia Desmottes.

Un órgano de “categoría internacional” según Javier Artigas

Y tan solo unos días después de darse por finalizado el proceso de restauración, visitaba la iglesia de Santiago Javier Artigas, catedrático de Órgano y Clave y jefe del Departamento de Música Antigua del Conservatorio Superior de Música de Murcia, que ha sido creador y director artístico del Ciclo de Órgano de la Región, así como director artístico de la restauración del órgano monumental de la Catedral de la capital murciana y coordinador del plan de restauración de órganos de la Región de Murcia.

Javier Artigas, catedrático de Órgano y Clave del Conservatorio Superior de Música de Murcia

Tras escuchar las primeras notas Artigas calificaba como “magnífico” el trabajo realizado, “hemos redescubierto un instrumento que estaba perdido y que es un puente entre los órganos del Barroco pleno y otros posteriores como el de la catedral de Murcia”.

Según el catedrático, este instrumento es muy importante para Jumilla, el municipio cuenta ahora con un órgano de “categoría internacional” y en torno al cual se pueden hacer muchas cosas. Artigas destaca que “refleja perfectamente el final de una época”, se ve caracterizado sobre todo en el gran coro de “lengüetas” o trompetería frontal, que además de la potencia sonora que ofrece, también son de un gran impacto visual.

Javier Artigas concluía su valoración afirmando que este órgano está en un nivel nacional muy alto, es un instrumento del mismo calibre que el de la Capilla del Palacio Real y lo llamó cariñosamente “bisnieto de los órganos de la Catedral de Cuenca” para destacar así su relevancia.

La inauguración del órgano podría realizarse en mayo

Manuel de la Rosa, párroco de la iglesia de Santiago

El párroco de la iglesia de Santiago, impulsor de este gran proyecto, fue el anfitrión del catedrático Javier Artigas y precisamente aprovechando su visita, quiso manifestar su inmensa alegría por ver culminado este trabajo y adelantó la posible fecha de inauguración, que podría realizarse a mediados del mes de mayo en una solemne misa pontifical de bendición presidida por el obispo de la diócesis y además, tras ella, se iniciaría una serie de tres conciertos en fechas sucesivas con grandes organistas.