Todas las organizaciones agrarias y agroalimentarias coinciden en la agónica situación en la que se encuentra el campo. En la Región de Murcia, la situación de los cultivos de secano y de la ganadería extensiva ha pasado de ser muy preocupante a convertirse en una situación alarmante, debido a la prolongación, por segundo año consecutivo, de un periodo de sequía invernal, que no cesa, y sin que se atisben precipitaciones que pudieran paliar, en alguna medida, los daños que ya son cuantiosos e irreversibles, y especialmente severos en el Altiplano, el Noroeste, la zona central y el Campo de Cartagena.

Sequía en el viñedoLas precipitaciones registradas en las Estaciones Agrometeorológicas que forman la red del Sistema de Información del IMIDA, han contabilizado desde el mes de octubre de 2022 hasta el cierre del mes de febrero de 2023, valores medios de 56 mm, con solo cuatro de las cincuenta y dos estaciones, con valores superiores a noventa milímetros y con ocho de ellas con registros inferiores a 30 mm. Registros propios de territorios considerados desérticos.

Con el cómputo de precipitaciones agregado por zonas, se constata un déficit hídrico alarmante, que contrasta con la ya muy baja media de precipitaciones, en el Altiplano, solo 52,0 mm frente a la medida de 93,36 mm.

Sequía en el cereal

Los cultivos de secano, como el trigo, la cebada o la avena, que necesitan la lluvia para desarrollarse, están prácticamente sentenciados, aunque para conocer la afectación real deberán pasar todavía unas semanas. Va a ser definitivo lo que haga el tiempo en los próximos 7-10 días. En aquellas zonas que por ser más tardías el cereal aún aguanta, si las lluvias no llegan en estos días la situación se tornará irreversible.

Los cultivos leñosos como frutales, olivar, frutos secos o viñedo, que habitualmente tienen una mejor resistencia a la sequía están también muy afectados, ya que arrastran varios años de bajas precipitaciones y de intenso calor. En algunas zonas, está en peligro la supervivencia de los árboles, especialmente los más jóvenes y aquellos que no pueden tener riegos de apoyo. En el olivar estamos en el inicio de una de sus etapas claves de cara a la próxima campaña como es la floración que además se ha adelantado un par de semanas debido a las altas temperaturas.

En la ganadería, especialmente la extensiva y semi-extensiva, es ya seguro que no habrá suficiente pasto disponible y que las pérdidas para los ganaderos serán muy cuantiosas, pues tendrán que adquirir más piensos que además siguen a precios muy altos, y llevar cisternas a sus animales para que puedan beber.

Reunión en el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación

Mesa de la sequía

El subsecretario de Agricultura, Pesca y Alimentación, Ernesto Abati García-Manso, ha convocado para mañana miércoles la mesa de la sequía, con el fin de evaluar su incidencia en el sector agrario para dar seguimiento a la última reunión técnica, reunida el pasado 30 de marzo, e intercambiar información con los sectores afectados.

A la reunión, que presidirá el subsecretario, han sido convocados las organizaciones profesionales agrarias, cooperativas agroalimentarias y comunidades de regantes, además de representantes de los ministerios de Agricultura, Pesca y Alimentación y de Transición Ecológica y Reto Demográfico, así como las comunidades autónomas.

La Comisión Permanente de Adversidades Climáticas y Medio Ambientales, cuya presidencia recae en el Ministerio de Agricultura Pesca Alimentación, sigue la situación climática desde el inicio del año hidrológico (del 1 de octubre y al 30 de septiembre).

El pasado 30 de marzo se reunió a nivel técnico, con personal de los ministerios implicados, en concreto, de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), de la Dirección General del Agua, de la Secretaría de Estado de Medio Ambiente, así como del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.

El objetivo de la reunión de mañana es continuar con el seguimiento de la situación de sequía que se atraviesa desde el año pasado y analizar la evolución climática, su incidencia en cultivos y ganado, además de analizar el estado de las reservas de agua en los embalses, así como servir de foro de encuentro de todos los actores implicados y analizar las propuestas de actuación.