La Asociación Naturalista Stipa realizó el pasado domingo una jornada de reforestación en la zona afectada por el incendio forestal de Sierra Larga del pasado mes de agosto, 150 personas se desplazaron hasta el lugar con el objetivo de contribuir a recuperar parte del monte calcinado en los 2 grandes incendios de Sierra Larga y Pico de la Tienda del año pasado, “ha sido un año atípico, con dos incendios que han estado al borde de ser grandes incendios, que son los que sobrepasan las 500 hectáreas y estos dos calcinaron sobre 400 cada uno, una superficie muy grande para el tipo de sierra que tenemos aquí”, indicó Juan José Bas, secretario de Stipa.

Plantación de especies forestales como arbustos productores de frutos

Durante la jornada se plantaron especies forestales en determinadas parcelas agrícolas abandonadas, permitiendo una regeneración natural en las zonas forestales.

Arbusto de reforestaciónLas especies a plantar fueron, sobre todo, aquellas que tienen mayor dificultad para recuperarse, como son las que no tienen capacidad de rebrote, intentando dotar de una mayor representatividad de determinados arbustos productores de frutos, “igualmente generar un mejor hábitat, más atractivo para la fauna que viene atraída por el refugio y la alimentación“, añadió Bas.

El proceso de plantación es sencillo pero hay que hacerlo bien, “porque son plantas que están en un ambiente silvestre y van a tener que aguantar los rigores del verano, pueden pasar muchos meses sin llover y de su correcta plantación dependerá que sobrevivan o que el porcentaje de supervivencia sea aceptable”.

Reforestación en familia con StipaBásicamente es hacer un hoyo de unos 30 cm de anchura y profundidad para introducir la planta con el cepellón totalmente enterrado, montar un alcorque a su alrededor para poder realizar un riego de apoyo a principios del verano y colocar un pequeño protector biodegradable para evitar que animales como el conejo repiquen la planta y limiten su crecimiento.

La replantación se realizó en una hectárea y media de terrenos agrícolas abandonados aledaños a la masa forestal calcinada en el incendio, “estas zonas se quemaron parcialmente pero no hay una acumulación de cenizas que pueda generar efectos adversos, la tierra tiene algo de pinocha de los pinos quemados de las inmediaciones pero el terreno es profundo y las labores de plantación se hacen cómodamente”, finalizó el secretario de Stipa.