Octubre es el mes de la dislexia y Jumilla ha querido hacer más visible esta dificultad del aprendizaje que afecta al 10% de la población iluminando anoche de rojo la fachada del Ayuntamiento y la fuente de la Plaza del Camionero Juan Soriano.
Se trata de la primera ocasión en la que en España se ha llevado a cabo esta iniciativa, que en Jumilla nace de la Asociación ADIX, que forma parte de la Plataforma Dislexia. En distintas ciudades se han iluminado espacio públicos con el mismo objetivo: reclamar mayor visibilidad para las personas afectadas por dislexia y que se cumpla el derecho de equidad en la educación de todos los niños y jóvenes del país.
La dislexia es una Dificultad Específica de Aprendizaje (DEA) de origen neurobiológico, caracterizada por la presencia de dificultades en la precisión y fluidez en el reconocimiento de palabras (escritas) y por un déficit en las habilidades de decodificación (lectora) y deletreo. Estas dificultades son consecuencia de un déficit en el componente fonológico del lenguaje y se presentan de manera inesperada ya que otras habilidades cognitivas se desarrollan con normalidad y la instrucción lectora es adecuada.