La creación de la nueva vía verde denominada ‘Chicharra’, que discurrirá entre las vías del antiguo tren, conocido popularmente con ese mismo nombre, y que unía Cieza con Jumilla, Yecla y las localidades alicantinas de Villena, Banyeres y el Muro de Alcoy, ha comenzado a ser una realidad tras anunciarlo así la Consejería de Cultura, Turismo y Medio Ambiente. Para ello, la Comunidad convocará a los ayuntamientos mencionados a unirse al Consorcio de las Vías Verdes de la Región e iniciar los trabajos para definir el diseño del trazado de esta nueva ruta.

En la legislatura 1999-2004 la concejalía de Medio Ambiente, presidida entonces por el concejal Ignacio Cutillas, solicitó a FEVE, entidad propietaria de la antigua vía, la cesión de los terrenos para proceder después a su acondicionamiento como vía verde.

Más de 75 años de historia

El primer tramo del tren del Chicharra se inauguró, entre Villena y Bañeres, en 1884. La finalidad principal era exportar vino desde el puerto de Alicante, pero tuvo también un importante tráfico de pasajeros. Por el otro extremo, el tren llegaba hasta Yecla y, dado el auge del ferrocarril a partir de los años 20, en 1924 se prolongó la línea hasta Jumilla y Cieza. En 1965 se concedió la línea a FEVE y el 1 de julio de 1969 realizó su último trayecto debido a las deudas acumuladas que hacían inviable el mantenimiento ya que, con una velocidad media de 14,5 kilómetros por hora, ya no podía competir con el transporte por carretera.

En los años posteriores a 1969, y una vez cerrada la línea, se empezaron a desmontar las vías y la mayor parte de los puentes, sobre todo los metálicos.